La Navidad no es un momento ni una estación, sino un estado de la mente. Valorar la paz y la generosidad y tener merced es comprender el verdadero significado de Navidad
Me olvidé olvidar, besos de colores inventados con sabor a rosas, de desdibujar susurros de amor encontrados en una caracola.
Me olvidé olvidar, la llave de los sueños en el cajón de tu memoria, de Caminar por el borde de mi Alma imaginando ser la musa de tu boca.
Me olvidé olvidar, los suspiros que he tejido en los versos que te escribo, de buscar el mapa de tu piel, en el mar celeste de las palabras que se acomodan.
Me olvidé olvidar, los secretos desnudos en la brisa de los amaneceres, de contagiar a la locura una sonrisa no gastada.
Me olvidé olvidar, la brújula que me lleva a un cielo bordado de aromas, de guardar en la maleta de las ilusiones el color de las auroras.
Me olvidé olvidar, la dulce melodía de unos violines en noches de terciopelo, de nostalgias inventadas en los precipicios de unos labios de caramelo.
Me olvide olvidar que llegó Marzo. Me olvidé olvidar ser Amapola...
Abro la ventana para liberar el tiempo
que retenía a golpe de recuerdos.
Se aferran mis pupilas entre los cristales,
escalando los momentos que me llevan
a sacudir el dolor hacia el olvido.
En silencio pensaré su risa recorriendo mis latidos
en este cuadro imaginado,
rescataré los mismos sueños,
una sonrisa, una ilusión perdida.
Recubriré su piel con caricias esculpidas de rojos besos.
Seré su abrigo escrito en un suspiro,
seré su mariposa de alas de colores,
seré un disfraz con el sabor del mar,
seré el café de su amanecer,
seré canela, azúcar, vino y sal,
seré la aguja que hilvana el eco de su voz,
seré la musa que borda auroras con su nombre,
seré el espejo que refleje su horizonte.
Me gustaría dar forma a los sentimientos que a veces nos son difíciles de expresar y que con la escritura, al igual que con una bella pieza musical, surgen fácilmente...
Gracias a todos los que os implicáis en leerme perdiendo un poco de vuestro tiempo, pues no hay nada mas hermoso el pensar que, en algún remoto momento de la lectura, pudisteis sonreír, llorar, emocionaros o alimentar los sentires...